Mientras se desarrolla la tarea de dragado para refular alrededor de 214 mil metros cúbicos en el canal de acceso del puerto de San Pedro en procura de devolverle la operatividad, Sin Galera entrevistó este sábado a un especialista en puertos como el local.
Gerardo Botto es capitán fluvial y de ultramar, perito naval en navegación fluvial y práctico de los puertos del río Paraná. Su “tesis” para la postulación como práctico la hizo en el puerto de San Pedro, por lo que conoce muy bien el canal de acceso y la zona de maniobras.
El rol del práctico es asistir al capitán de un buque para la entrada y salida de los puertos. Por eso, quien cumple esa tarea debe conocer muy bien la zona en la que le toca intervenir. Cuando Botto habla del puerto de San Pedro se nota ese conocimiento.
En su análisis de la varadura del Yasa Tokyo el pasado 23 de mayo, Botto señaló que confluyen tres situaciones que es necesario tener en cuenta: la bajante del Paraná; la sedimentación extraordinaria; y la situación propia del canal, que puede haber sufrido derrumbes en el veril.
“Debería tener una cierta forma y profundidad“, señaló y advirtió que el canal de acceso del puerto local es “como un cajón” y no, como debería ser, de “un plano inclinado”, lo que “evitaría los derrumbes“.
Además, Botto consideró que hubo “suerte” de que esto no haya ocurrido antes y que, si el dragado que se lleva adelante es similar al que se hizo siempre y “hacen un cajón”, posiblemente “salga este buque, pero cuando tenga que entrar otro le puede pasar algo similar“.
“El canal necesita tener ese talud, lo tiene que hacer una draga que tenga la capacidad de formar ese plano inclinado haca el fondo del canal”, señaló.
“A nosotros, los prácticos, siempre nos han consultado, siempre hemos asesorado, pero lamentablemente no se ha logrado que nuestras recomendaciones fueran tomadas al 100 por ciento”, dijo Botto.