Tras el terremoto de magnitud 8,8 que sacudió la costa oriental de Rusia y que provocó alertas de tsunami en varios países con costas del océano Pacífico, una de las preguntas que más surgieron en redes sociales fue qué hacer cuando un fenómeno natural de esa magnitud llega a tu país. No obstante, esa catástrofe puede tomarte de vacaciones a bordo de un crucero y ahí la ecuación cambia, por eso es mejor saber qué medida tomar en cada situación.
En redes sociales se viralizó un video que mostraba a turistas en pánico mientras trataban de alcanzar un crucero en Hawái y sonaban las sirenas. El barco se vio obligado a enviar mensajes de emergencia a todos los pasajeros, advirtiendo que partiría antes de lo previsto debido a las alertas de tsunami provocadas tras el sismo cerca de la península de Kamchatka, en Rusia.
A quienes no lograron abordar el crucero antes de su partida se les brindó transporte a zonas más elevadas para resguardarse de las posibles olas, según relató The New York Times. Posteriormente, el barco pudo regresar a buscarlos una vez que el puerto fue reabierto. A partir de esta situación, las plataformas en Internet se llenaron de preguntas sobre qué hacer en esa situación.
Si tenés reservado un crucero o planeás hacer uno en el futuro, este incidente tal vez te haya hecho preguntarte qué ocurriría si se produce un desastre natural mientras estás a bordo. Obviamente, hay varios factores a tener en cuenta, como el tipo de desastre y su proximidad a la ubicación del barco y a sus destinos previstos, como explicó un artículo del medio británico Lad Bible.
Los huracanes suelen ser la mayor preocupación para los cruceros, especialmente aquellos que navegan por el Caribe y el Atlántico. Pero, por suerte, los capitanes cuentan con sistemas de predicción avanzados que generalmente les permiten cambiar la ruta antes de estar en peligro.
Así que, si estás en un crucero cuando se emite una alerta, lo más probable es que te quedes unos días extra a bordo y que se cancelen algunas paradas planeadas. La buena noticia es que un crucero puede viajar más rápido que, por ejemplo, un huracán, y es extremadamente raro que quede atrapado en uno.
Por otro lado, si un crucero está atracado, navega cerca de una zona con erupción volcánica o si hay una advertencia al respecto, debe cambiar su rumbo. Los puertos en esas zonas probablemente estarán cerrados, lo que implica que deberás permanecer en el barco. Puede ser frustrante, pero es una medida de seguridad necesaria. Aunque las nubes de ceniza complican seriamente otros medios de transporte, como los vuelos, los barcos pueden simplemente alejarse de las áreas afectadas.
Los terremotos, como el reciente de magnitud 8,8 cerca de Rusia, no deberían afectar a un barco a menos que esté amarrado en el muelle. Si un terremoto ocurre en el lugar donde el barco está o planea estar atracado, lo más probable es que se desvíe y que se cancele esa parada. Sin embargo, podrías enfrentar complicaciones si justo desembarcas en una zona afectada y tenés un vuelo de regreso previsto desde allí.
Aunque algunos pasajeros piensan que su mayor temor en un crucero debería ser un tsunami, lo cierto es que los tsunamis no representan tanto peligro en aguas profundas. Las olas solo ganan altura cerca de la costa, por lo que si hay amenaza en un puerto, los barcos simplemente se alejan mar adentro.