Una periodista y un camarógrafo vivieron momentos de tensión este lunes cuando realizaba un móvil en vivo en televisión desde Córdoba y un motochorro los sorprendió desde atrás para intentar robarles el teléfono celular.
El reloj en pantalla marcaba las 14:54. En el estudio se discutía el tema del fentanilo contaminado que, según se supo en las últimas horas, afectó a un bebé de la provincia de Córdoba. Fue ese el caso que estaban cubriendo Sofía Pérez D’Abreu, la corresponsal de C5N en esa provincia, junto al camarógrafo “Beto” Pereyra.
La transmisión mostraba a la periodista en uno de los rectángulos inferiores, en donde el director de cámaras la había ubicado al dividir la pantalla para que los televidentes pudiesen ver a la vez el piso y a los cronistas en exteriores. Pero la discusión que tenía lugar en los estudios de Buenos Aires de pronto fue interrumpida por los gritos de Sofía. En su recuadro, la imagen se había movido y la cámara temblaba. Le habían querido robar.
Al aire se pudieron ver momentos de confusión. La transmisión pasó a mostrar directamente la señal que venía de Córdoba, en donde la imagen estaba en movimiento, mientras el camarógrafo intentaba acomodar el celular con el que estaban transmitiendo.
Desde el piso del canal los conductores preguntaban a su compañera qué había pasado. En Córdoba, la cronista, visiblemente conmocionada, le consultaba a la vez a su camarógrafo: “¿Te robaron?”.
Segundos después y cuando el celular estuvo nuevamente ubicado, la notera alcanzó a contar lo sucedido: “Nos quisieron robar, estamos bien”, afirmó. Y, consternada, agregó: “¡Qué basura!. No lo esperábamos, perdón”
De fondo, se escuchaba también la voz de “Beto”, el camarógrafo: “Pasó dos veces”. La cronista ahondó: “ya había pasado una vez y pidió perdón. Después se cruzó de nuevo en moto con casco puesto”. “Si lo buscan, sale”, apuntó también su compañero desde atrás de cámara.
“Tengo que decir lo bien que agarraste el celular Beto, lo bien que lo agarraste” expresó la cronista mientras recuperaba el aire.
Según contó la cronista más tarde, cuando estuvo repuesta, el ladrón había pasado dos veces frente a cámara. La primera, desapercibido. La segunda, intentó tomar el trípode en el que estaba calzado el celular. Pero el camarógrafo tomó fuertemente el aparato e impidió el robo, mientras el ladrón seguía adelante en su moto.
Tanto la periodista como el camarógrafo indicaron al aire que estaban bien y que no les pudieron robar nada.
