Patricia Krenwinkel, una de las figuras más reconocidas del macabro círculo de Charles Manson, recibió por segunda vez en tres años una recomendación favorable de libertad condicional por parte de la junta de California. Sin embargo, el destino de la persona que lleva más tiempo presa en el Estado Dorado aún depende de la aprobación del gobernador Gavin Newsom, quien ya había vetado una situación similar en 2022.
Krenwinkel tenía apenas 21 años cuando participó en los brutales asesinatos orquestados por Manson en agosto de 1969, que incluyeron el crimen de la actriz embarazada Sharon Tate, de 26 años, y otras seis personas en Los Ángeles. Aquellos delitos marcaron un antes y un después en la historia criminal de Estados Unidos.
De acuerdo a los detalles judiciales, Patricia Krenwinkel:
Krenwinkel permanece detenida en la Institución para Mujeres de California desde hace más de cinco décadas y, con 77 años, es la persona con más tiempo en prisión en el estado, según explicaron desde NPR.
La recomendación de libertad no implica la liberación automática. El proceso contempla una revisión interna del fallo y luego el análisis del gobernador Gavin Newsom, quien tiene 30 días para aceptarlo o revocarlo. En 2022, el mandatario estatal ya había rechazado un pedido similar.
En específico, este 31 de mayo de 2025, la Junta de Libertad Condicional de California consideró nuevamente a Krenwinkel “apta para ser liberada”, durante su 16° audiencia desde que ingresó en prisión.
El equipo legal de Newsom puede tomarse hasta 120 días para revisar los fundamentos jurídicos de la decisión. Una vez completado ese paso, el gobernador tendrá un mes para emitir un fallo definitivo.
En su argumentación anterior, Newsom escribió que Krenwinkel aún representaba “un riesgo irrazonable para la seguridad pública” y que “no había desarrollado la comprensión suficiente de los factores que la llevaron al crimen”.
La historia personal de Krenwinkel muestra un patrón de vulnerabilidad que la llevó a incorporarse al círculo de Manson:
Años más tarde, Krenwinkel declaró que fue víctima de manipulación emocional, abuso físico y psicológico, y que vivió completamente influenciada por la figura dominante de Manson.
En su audiencia de libertad condicional de 2016, relató que había intentado escapar del grupo en varias oportunidades, pero el líder la hacía regresar.