Tras la sesión del Concejo Deliberante en la que aprobaron un pedido de informe sobre la situación del puerto, que tiene al buque Yasa Tokyo a la espera de un dragado que le permita salir por el canal de acceso hacia la Hidrovía, el concejal Matías Franco, representante de los sindicatos en el directorio del Consorcio, dialogó con La Opinión.
“Estamos muy preocupados”, dijo Franco y señaló que estaba todo listo para la firma del contrato para que la draga del grupo Jan de Nul comience la tarea para refular alrededor de 214 mil metros cúbicos que permitan devolver la operatividad al puerto.
El plan, dijo Franco, es llevar el canal a 9,80 metros, “que son las condiciones que piden los operadores del puerto para poder trabajar, para que el puerto vuelva a ser operable al 100 por ciento, como veníamos meses atrás”.

“Los trabajadores están muy preocupados, acongojados por esta situación que es absolutamente anómala y atípica“, dijo el concejal y sindicalista portuario. “Es, para que el ciudadano entienda, como que se formó un médano debajo del agua, de 1,5 km de longitud“, graficó.
Consultado respecto de las dudas generadas en torno a si el buque podría maniobrar para retomar el canal, aseguró que la batimetrías indican que “el 90 por ciento de la sedimentación se produjo en el canal, no en la zona de maniobras y el muelle“.
Ello implica que el Yasa Tokyo podría salir sin necesidad de aligerar su peso vía descarga de parte de las 33 mil toneladas de trigo que tiene en sus bodegas, una vez que el canal haya sido dragado.
“En 10 días estaríamos en condiciones de que el buque pueda zarpar, aunque lo que más nos preocupa son los barcos que quieren ingresar a San Pedro para llevar sus cargas y generar mano de obra para los trabajadores”, señaló Franco.
Consultado respecto de los antecedentes que esta situación dejan sobre el puerto de San Pedro, analizó: “Es una cuestión de fuerza mayor producida por la naturaleza. Se han varado buques en la Hidrovía por efecto de la naturaleza. Ojalá que los armadores y todo el mercado de comercio exterior entiendan que no fue una mala gestión de la autoridad portuaria”.
Franco recordó que el Yasa Tokyo ingresó al muelle con un calado que no podría haber pasado con el nivel de sedimento registrado tras el temporal.
“Hay ingenieros de Recursos Hídricos trabajando fuertemente para constatar fehacientemente que se trató de un fenómeno totalmente atípico y producido por la naturaleza“, confirmó.

Además, destacó que tras el dragado de principios de mayo, además de los controles y mediciones del Consorcio de Gestión del Puerto, hubo un trabajo de Prefectura Naval Argentina para determinar la profundidad. “Es quien emite la determinante que toman los buques para ingresar o salir“, señaló.
El presidente del Consorcio, Carlos Casini, había informado el martes a La Opinión que el directorio decidió contratar a Jan de Nul y que utilizarán recursos propios, provenientes de los intereses de los 450 millones de pesos que el Gobierno nacional envió en la gestión anterior para una obra cuyos costos excedieron ese monto producto de la inflación.
Aun así, advirtió Casini, esos recursos, que ascienden a alrededor de 1500 millones de pesos, no alcanzan para cubrir el total que costará el dragado, por lo que esperan fondos de Provincia para saldar la deuda que quedará con la empresa belga.