Existe un pueblo en la frontera entre España y Portugal donde no sólo se vive cotidianamente con dos husos horarios, sino que también se habla en dos idiomas y todos tienen doble nacionalidad.
La parte española sigue el horario de Europa Central (CET/CEST), mientras que la parte portuguesa se rige por el horario de Europa Occidental (WET/WEST), lo que implica una diferencia de una hora entre ambos lados.
Esta situación permite que, por ejemplo, los habitantes celebren la llegada del Año Nuevo dos veces: primero en la parte española y luego en la portuguesa.
Como se dijo, este singular lugar se encuentra justo en la frontera con Portugal y forma una única localidad con el pueblo portugués de Río de Onor. En esta nota, de qué lugar se trata.
El pueblo de Castilla y León que vive con dos husos horarios es Rihonor de Castilla, en la provincia de Zamora, comunidad autónoma de Castilla y León. Y no es de lo único que tiene dos este pueblo maravilloso. También tiene dos nacionalidades y dos idiomas por caso.
Y es que Rihonor de Castilla en España forma un mismo pueblo con Rio de Onor, perteneciente al distrito de Bragança, Portugal. Una rareza maravillosa ya que están juntos, viven juntos y bien, pese a tener dos nacionalidades, dos idiomas y dos husos horarios.
Aunque administrativamente está dividida entre España y Portugal, los vecinos consideran que forman una sola comunidad. De hecho, se refieren a las dos partes del pueblo como povo de cima (pueblo de arriba, en el lado español) y povo de abaixo (pueblo de abajo, en el lado portugués).
Y se entiende: este pueblo compartido por dos países está compuesto por 100 habitantes. 70 del lado portugués y 30 del lado español. Pero ellos pasan en muchas esquinas de una frontera a la otra y vuelven a la anterior, sin ninguna aduana ni barrera, claro.
No está de más afirmar que Rihonor de Castilla es notable por su riqueza lingüística. Aquí, sus habitantes no solo hablan español y portugués, sino que algunos, especialmente los mayores, aún conservan el uso del rionorés, un dialecto del leonés.
Lleno de particularidades, Rihonor de Castilla y Rio de Onor, con sus 100 habitantes repartidos en las dos partes de la frontera, ofrecen una experiencia única donde la historia, la naturaleza y la cultura se entrelazan a ambos lados de la frontera. Un destino ideal para quienes buscan tranquilidad, autenticidad y un contacto directo con la vida rural tradicional.
Y si bien a un lado o al otro de la frontera no es un territorio demasiado grande, hay varios sitios muy atractivos donde se suelen ver a los turistas sumando fotos.
Sus lugares más destacados:
En cuanto a la arquitectura de ambos pueblos, refleja la estrecha relación entre las personas y su entorno. Las casas están construidas mayoritariamente con piedra y pizarra, materiales abundantes en la zona, y presentan una distribución típica de la vida rural: la planta baja se destina a las cuadras o establos, mientras que la planta superior es la vivienda.
Esta organización responde a la necesidad de aprovechar el calor que desprenden los animales durante los fríos inviernos de la sierra. Además, en Río de Onor todavía se conservan varios elementos de uso comunitario, como los antiguos molinos de agua y hornos comunales, que siguen utilizándose entre los vecinos.
Estos espacios no solo eran esenciales para la supervivencia diaria, sino que también reforzaban el sentido de comunidad que caracteriza a esta localidad. Tenga en cuenta que, en conjunto, ambas localidades suman alrededor de un centenar de habitantes: son unos 75 en el lado portugués y poco más de 30 en el lado español. Está claro que son pocos, se conocen mucho y, a pesar de ser fronteras, es un pueblo muy hermanado.
La vida tradicional aquí sigue muy presente y caminar por sus calles es como hacer un viaje en el tiempo, donde se respira un estilo de vida sencillo, autosuficiente y profundamente conectado con la naturaleza.
