Al menos una decena de trabajadores de la fábrica papelera Celupaper recibieron en los últimos días telegramas de despido mediante el que la empresa les comunica la desvinculación laboral, en medio de la incertidumbre creciente en esa planta fabril de San Pedro.
A la apertura de un programa de retiros voluntarios, se suman estos despidos en un contexto de paralización de la producción y dudas respecto de que retomen, puesto que así como despidieron a empleados de menor antigüedad, buscan reubicar a otros.
Los despidos fueron comunicados por el apoderado de la empresa, Javier Speranza, como “consecuencia de haber paralizado la máquina de producción de bobinas de papel por falta de venta y disminución de la comercialización por el ingreso de productos importados“.
La situación, dicen los telegramas de rescisión de contratos, afecta la posibilidad de “mantener la producción“, por lo que están “analizando la reubicación del personal con mayor antigüedad“.
Desde antes de junio, los trabajadores mantuvieron una serie de reuniones con personal de Recursos Humanos de la empresa que los “invitaba” a “mudarse” a la fábrica de Cardales. En ese momento advirtieron que la producción en San Pedro iba a disminuir.
“Hay entre 12 y 14 compañeros que están cobrando el 80 por ciento porque la máquina está parada. La cosa está muy complicada y el sindicato no está activando“, dijeron a La Opinión trabajadores de la planta.
Semanas atrás, una asamblea de la Federación de Trabajadores de la Industrial del Papel advirtió sobre la situación del sector en las puertas de Papel Prensa, en medio de la discusión salarial con las empresas.