En una final que tuvo que llegar hasta los penales para que se decida un campeón, Inglaterra derrotó a España en lo que fue una revancha y se quedó con la Eurocopa femenina 2025 que se disputó en Suiza.
Luego de que el tiempo reglamentario finalice 1 a 1, al igual que los 30 minutos suplementarios, las inglesas ganaron 3 a 1 en una floja definición desde los 12 pasos gracias a su “salvadora” y con la particularidad de tener un disparo que estrenó la nueva regla de “doble toque involuntario”, en un remate, por lo que se repitió la ejecución. De este modo, las inglesas obtuvieron el bicampeonato y las ibéricas, ganadoras del último Mundial, siguen sin ganar el certamen.
El camino para llegar hasta la final fue diferente para ambas selecciones. España, que contaba con figuras como Alexia Putellas y Aitana Bonmatí no tuvo inconvenientes para pasar a los octavos con puntaje ideal: goleó 5 a 0 a Portugal, 6-2 a Bélgica y derrotó 3 a 1 a Italia. En cuartos sacó a Suiza (2-0) y en semis eliminó a Alemania, la máxima campeona de la Euro, tras ganar 1 a 0 en la prórroga. Por su parte, Inglaterra, perdió 2 a 1 ante Francia en el debut y luego goleó 4-0 a Países Bajos u 6 a 1 a Gales, para finalizar en el segundo lugar. En cuartos, debió llegar a los penales para dejar en el camino a Suecia y en semifinales le ganó 2 a 1 a Italia en suplementario, con un gol de Chloe Kelly en el último minuto, jugadora que fue clave en la definición.
La final enfrentó entonces a estas dos selecciones que también disputaron el duelo definitorio en la Copa del Mundo del 2023, que había quedado en manos de las españolas. Fue la Furia, la que empezó ganando el partido que se jugó en el St. Jakob Park de Basilea. Mariona Caldentey estableció el 1 a 0 a los 25 de la primera etapa. La jugadora ganó en las alturas y cabeceó tras el centro de Ona Batlle. De ese modo finalizaba la primera etapa de la final. Pero a los 12 del segundo tiempo iba a llegar la igualdad. Chloe Kelly envió el centro de pierna derecha y Alessia Russo, también de cabeza, puso el 1 a 1.
A partir de allí, el encuentro fue un poco para cada una. Las inglesas aprovecharon el envión del tanto para continuar con el protagonismo durante algunos minutos. Luego, las españolas se hicieron dueñas de la pelota y las rivales buscaban espacio para el contraataque. En el final del tiempo regular, las ibéricas merecieron algo más, sin embargo, la final debía continuarse en los 30 minutos suplementarios. En la primera parte de la prórroga, hubo una situación por bando, pero España fue un poco mejor.
En los segundos 15 minutos ambas sintieron el cansancio y la final debía definirse por penales, algo que no pasaba desde la primera Eurocopa, de 1984, cuando Suecia le ganó justamente a Inglaterra, pero en una final que se disputaba a doble partido, que tuvo una victoria de cada uno, pero que las suecas ganaron en la definición desde los 12 pasos.
Y la tanda tuvo un inicio con una situación muy particular. La inglesa Beth Mead se hizo cargo de la ejecución, pateó y convirtió. Sin embargo, la pelota tuvo un doble toque, igual que el remate de Julián Álvarez en la última Champions ante Real Madrid. Lo que sucedió en aquella oportunidad, fue que se dio el disparo como fallado. Pelo LA IFAB (International Football Association Board) cambió el reglamento a partir del 1 de julio pasado. específicamente la regla 14, para diferenciar entre un doble toque involuntario y uno voluntario durante la ejecución de un penal. Todo, influenciado por aquella polémica que se dio con el delantero argentino. Es por esto que Beth Mead volvió a patear, pero la arquea Catalina Coll se lo atajó.
Los penales continuaron y Patri Guijarro adelantó a España. Greenwood empató. Hapton se lo detuvo a Caldentey y Marca Charles puso el 2 a 1 para las inglesas. Coll le atajó el disparo a Williamson, pero Salma Paralluelo no aprovechó y la mandó afuera. El último penal para Inglaterra le tocaba a Chloe Kelly, la que le dio el pase a la final a su selección, y no falló. Fue 3 a 1 y felicidad para las campeonas. De este modo, las inglesas pudieron vengarse de España, que fue la que se quedó con la Copa del Mundo del 2023 tras ganarles 1 a 0 en la final. Además, es el bicampeonato para Inglaterra, que se quedó con la Euro del 2022 cuando le ganó 2 a 1 a Alemania en la definición que se jugó en el estadio Wembley.
La arquera Hannah Hampton, que tapó dos de los lanzamientos en los penales, habló tras el título: “Este equipo es, simplemente, increíble y extraordinario. En todo este torneo hemos demostrado que éramos capaces de remontar en el marcador después de ir por debajo. Tenemos esa determinación”, destacó. “No nos rendimos nunca, siempre seguimos luchando y eso es lo que hicimos hoy”, añadió en declaraciones a la BBC la arquera que fue elegida como mejor jugadora de la final. “No me lo creo, creo que voy a necesitar un tiempo para digerir esto”, culminó. La pieza fundamental de las campeonas es la entrenadora Sarina Wiegman, que como DT logró su tercera Euro, dos con Inglaterra y la otra con Países Bajos, país de donde es oriunda.
Por el lado de las perdedoras también hubo declaraciones. Irene Paredes, capitana de la selección español, expresó: “Es durísimo este momento. Lo intentamos de todos los medios. No hemos estado bien en los penales, pero creo que merecíamos mas, pero esto no va de merecer, va de tener esa pizca de suerte que Inglaterra la ha tenido durante todo el torneo. Confiaba en que lo íbamos a sacar adelante pero no ha podido ser. Hemos tenido momentos los dos equipos. Hemos tenido más ocasiones nosotras. No va de tener la posesión, va de marcar. Los penales eran una oportunidad de ganar. Ellas también juegan, ellas nos marcan un gol que creo que es evitable. Forma parte de esto, hay errores, hay aciertos, ellas estaban cómodas llegando a penaltis. Hoy no hemos estado como sabemos estar y es una faena”, apuntó.