Un terremoto de gran intensidad registrado el 29 de julio de 2025 al este de la península de Kamchatka, en Rusia, provocó una alerta de tsunami para una amplia franja del Pacífico. La magnitud del movimiento telúrico, que alcanzó 8,8 grados, activó protocolos de emergencia en zonas costeras como Hawái, donde las autoridades ordenaron evacuaciones preventivas.
El Servicio Meteorológico Nacional de Estados Unidos (NWS, por sus siglas en inglés) emitió advertencias sobre posibles olas de tsunami de entre uno y tres metros de altura. Las primeras comenzaron a impactar áreas costeras de las islas hawaianas la noche del martes, mientras residentes y turistas recibían notificaciones de alerta en sus celulares.

De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés), el sismo tuvo lugar en la interfaz de la placa del Pacífico y la placa Norteamericana, en la zona de subducción conocida como el arco Kuril-Kamchatka. Se trata del terremoto más potente a nivel mundial desde el de Tohoku, Japón, en 2011.
La alerta de tsunami fue acompañada por llamados oficiales para trasladarse a terrenos elevados. En ese sentido, el Departamento de Gestión de Emergencias de Honolulu pidió a la población evitar las áreas costeras hasta nuevo aviso. En varios sectores de la isla de Oahu, que incluye a Honolulu, los residentes se desplazaron por precaución hacia zonas seguras.
Videos publicados en redes sociales muestran el momento exacto en que el mar comenzó a retroceder, en particular en la bahía de Hanalei, en la isla de Kauai. Una cámara instalada en ese lugar registró un retroceso de más de 30 metros del nivel habitual del agua, fenómeno característico antes del arribo de una ola de tsunami.

Usuarios en plataformas como TikTok documentaron las horas posteriores a la emisión de la alerta de tsunami. Imágenes compartidas por turistas y residentes muestran filas de autos que evacuan de las zonas costeras, estaciones de servicio colapsadas y supermercados llenos de personas que buscan abastecerse de productos esenciales.
Una creadora de contenido que se identificó como Miia Amarii publicó imágenes tomadas en Honolulu que mostraban la situación en las calles poco después de que se activara el aviso. Otras grabaciones captaron el sonido de las alarmas de tsunami al encenderse en varias localidades de las islas hawaianas.

Ulises Juárez, un turista que se encuentra en Maui, relató a Telemundo 52 que en su hotel se suspendieron los servicios gastronómicos y que los huéspedes fueron informados por mensajes repetitivos para mantenerse alejados del mar. Según su testimonio, aunque el ambiente era de relativa calma, se advertía que las primeras olas no siempre son las más peligrosas y que podían producirse réplicas más intensas.
“En algunos lugares, el agua ha retrocedido hacia el mar, según las noticias locales que he estado viendo aquí en Hawái”, le dijo al medio latino. “No se sabe cuanto tiempo va a durar. Simplemente, todo el mundo está en alerta y aquellos cerca de la costa han evacuado”, agregó.
Las autoridades indicaron que el peligro podría extenderse durante varias horas debido a la posibilidad de múltiples olas. Algunos reportaron el cierre de hoteles y comercios, así como la interrupción de servicios. Según Juárez, los residentes de edificios en zonas bajas fueron trasladados a niveles superiores como medida de precaución.

De acuerdo con la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, por sus siglas en inglés), se registraron aumentos del nivel del mar de más de un metro en Haleiwa, al norte de Oahu. En Kahului, la altura de las olas alcanzó aproximadamente tres metros, según el Centro de Alerta de Tsunamis del Pacífico.
Chip McCreery, vocero del Centro, explicó que las autoridades buscaban que las mediciones de altura descendieran por debajo del umbral para considerar una reducción en el nivel de alerta. “Seguiremos monitoreando la situación durante la próxima hora; esperamos que entonces podamos tomar la decisión de bajar el nivel de alerta a ‘advertencia’”, precisó, según lo retomado por Newsweek.
Horas más tarde, el Departamento de Gestión de Emergencias de Honolulu comunicó que la alerta de tsunami fue degradada a un aviso. “Se cancelan las evacuaciones en Oahu. Los residentes pueden regresar a sus hogares”, publicó la agencia en X.
Aun así, se mantiene el llamado de las autoridades a mantenerse alejados del mar hasta nuevo aviso. Las playas y puertos deportivos permanecen bajo observación debido a la posibilidad de corrientes peligrosas o fluctuaciones inesperadas del nivel del agua.